Booooooom!
Ya lo hemos dicho antes, lo llevamos diciendo durante mucho tiempo, lo hemos dicho con diferentes palabras, pero el mensaje ha sido básicamente siempre el mismo.
Sin embargo, parece que la naturaleza humana no es receptiva a los buenos consejos, así que ahora tenemos que decirlo por las malas – una vez más. Por fin, la burbuja ha reventado y esto es algo bueno, aprender con la práctica es esencial, si no queremos que las cosas se vayan a pique. No podemos ir por ahí ofreciendo porquería a precio de oro, estafando a turistas normales donde sea que podamos cobrarles un plus por los así llamados servicios VIP, servicios que deberían en realidad ser gratuitos. El otro día una amiga me dijo que una celebridad había reservado una mesa en un restaurante y había pedido una mesa más aparte; después de cenar pidió la cuenta y se sorprendió al ver que no le habían cobrado por la mesa extra. Cuando el dueño le preguntó por qué debería cobrarle por una mesa extra, ella le contestó que con anterioridad ya había pagado más de 5.000 euros por una mesa extra… Cosas como estas son simplemente indignantes, cualquier establecimiento que hace este tipo de cosa tiene gran parte de culpa en lo que está sucediendo en la actualidad.
Ibiza solía ser la isla en la que todo el mundo lo pasaba genial, sin importar quién fueras o de dónde vinieras, hippies e ibicencos, turistas corrientes y los auténticos vip (ya sabes, significa very important person-persona muy importante), famosos y fans, todos juntos pasándolo bien, sin mierdas de pulseras, donde necesitas la verde para ir a la terraza, la roja para la zona vip y la negra para tener acceso a todas las zonas – ¿qué cojones le está pasando al cerebro de esa gente? NO puedes cobrar 20 euros por una cerveza y esperar que la gente se lo pase en grande. Cada hotel de 2 estrellas cobra 200 euros por una habitación de mierda, cada hostal que solía cobrar 45 euros ahora cobra 4 veces más que eso…
Ibiza siempre ha tenido sus altos y bajos, este es un proceso natural que nos hace recordar lo que somos o, mejor dicho, lo que NO somos. Nosotros NO somos tan sólo el patio de recreo de los ricos, nosotros NO somos una plataforma para que farsantes se luzcan rociando botellas de champán, nosotros NO somos un paraíso para que especuladores alquilen casas por una fortuna, nosotros NO somos clubs de música electrónica comercial que se las dan de importantes y, sin duda alguna, nosotros NO somos tan sólo una isla de fiesta.
Esta es una isla mágica, con todo lo que conlleva ser un paraíso para todo tipo de personas que se respetan unas a otras, preparadas para pasárselo mejor que nunca en compañía de personas afines a ellas; así que, volvamos a esto y conservemos lo que la hace tan especial, no la arruinemos. Y si no estás dispuesto a esto, entonces es mejor que te vayas, nosotros no necesitamos espectadores, sólo actores y, en cualquier caso, decir estupideces hace mucho que pasó de moda; además, y ya sé que me repito a mí mismo una y otra vez y otra vez más cuando digo esto, pero lo amo y lo vivo – quality never prostitutes.
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