vision importante primordial
Es tan simple como lógico, todo en la vida está basado en las matemáticas y también lo está el fenómeno del siempre creciente número de turistas que disfrutan de nuestra vida nocturna en relación a la música que se toca y al ambiente resultante de todo esto.
Cada año más gente visita la isla, constantemente se abren nuevos espacios, al mismo tiempo que otros se cierran y también hay otros que continuamente intentan ampliar su capacidad. Pero, ¿qué significa todo esto para el cluber normal y corriente?No me entiendas mal, todo el mundo tiene derecho a salir de marcha y pasarlo bien; nosotros luchamos por eso durante muchos años, pero simplemente no hay suficientes ‘auténticas’ fiestas para mantener el alto estándar por el que se conoce a Ibiza. Saliendo últimamente me encontré a mí mismo entre hordas de usuarios de smartphones (ya hablé en profundidad acerca de esto en la carta anterior), no haciendo nada que no sea sacar fotos y hacer vídeos de un evento para entonces ‘compartirlo’ en cualquiera de las redes sociales, sin disfrutar del momento y, desde luego, sin disfrutar de la noche con aquellos que tienen a su alrededor.
Por encima, se contentan con un cierto estilo de música; ese que pincha un creciente número de ‘DJs’ –yo lo llamo ‘break disease’- y lo único que hacen es pinchar música sin alma que suena siempre igual, quitando los bajos y los medios durante casi un minuto para después volver a lanzarlos, esperando que las multitudes levanten sus brazos en el aire para celebrar este momento ‘único’ que se repite cada dos minutos –y las multitudes hacen exactamente lo que se espera de ellas. Incluso las canciones que tienen una historia se ‘sincronizan’ hasta la muerte de manera desrespetuosa y sin sentido, sólo para seleccionar su momento cumbre y meterlo a la fuerza en el mismo set una y otra y otra (y otra) vez. ¡Venga ya!
Si a esto le añades la cantidad de volumen de algunos sistemas de sonido, que te obligan a usar tapones para los oídos para no dañarte seriamente los tímpanos, tengo que decir que eso no es lo que yo llamo una buena fiesta, es simplemente una idiotez. Si todo el club usa tapones, entonces ¿por qué no bajar el volumen para conseguir el sonido adecuado?
Por suerte, hay un montón de excelentes ‘auténticos’ clubs y noches que respetan la música y que atraen al tipo correcto de público, pero encontrarlos es cada vez más y más difícil. Casi que tienen que mantenerse en secreto para no acabar abarrotados. Como dijo Mike Manumission, una buena fiesta no está definida por el número de gente que acude a ella, sino por la calidad de esta gente.
Así que, si queremos mantener nuestra reputación de ser el destino de fiesta número uno del planeta, tenemos que defenderlo y entregar calidad. De otra manera acabaremos retrocediendo, o tal vez necesitamos volver a concentrarnos en lo esencial para poder crear fiestas perfectas.